Ecos del Día de los museos. De la Noche de los museos. Museos...¿morada de las Musas? No lo creo. Contenedores. Acaparamiento. Exposición de la rapiña en muchos casos. Peor: desligamiento del origen (por supuesto, todo se justifica) Cantidad. Valor. Precio. Ceremonial fúnebre. Turismo accidental. El visitante y su melancolía. Acumulación de objetos. Desubicación de su sentido. ¿Qué miran los visitantes en los museos? Engullen imágenes, cuadros, utensilios, esculturas, mapas...¿Engullen? Equívoca pedagogía. Pase visí, pase visá...cantábamos en un juego de infancia que integraba a niños y niñas. Algo así con las visitas a los museos, pasar y decir que has estado. Pasar y no enterarte de nada. Allez, allez, te agitan en el Louvre si pretendes pararte una micra de segundo no prevista. Da igual. ¿Qué conclusión sacas de ver la Gioconda en directo, suponiendo que cien cabezas japonesas te permitan ver algún ángulo del cuadrito? ¿Dice algo la Victoria de Samotracia de lo que fue o es una vieja obra adaptada a un fin nuevo? Como mucho te espera un síndrome de Stendhal pero fuera de contexto. El profesor Arturo Leyte, uno de los mayores expertos en el poeta alemán Hölderlin, dice que se peregrina a los museos para acreditarse democráticamente como ilustrados. Me parece que es demasiado bondadoso, no obstante la hondura de su crítica. La Ilustración actual en España es ocio, entretenimiento, apariencia, turismo, clientela. Casi nadie se hace preguntas sobre el pasado ni sobre el sentido de las obras en su contexto. Se destruyeron los contextos. El vínculo ha perecido.
Seguro que tienes razón, pero ¿eso significa entonces que la cultura no es democrática? ¿que es una utopía eso de acercarla a las masas?
ResponderEliminarAunque no se si me interesa la respuesta.
De todas formas tanta gente de la cultura habla últimamente con tanto desprecio de quienes no la ¿poseen?¿disfrutan?¿padecen?
Eso me choca.
¿Acaso esa cultura no debería hacerles amar intensamente o conmoverse ante esos?