Despertar y ver la caída de la nieve a través de la ventana. La bondad de la naturaleza en este caso se sobrepone al ejercicio de las tradiciones obsoletas, del espectáculo de masas y del negocio que vive de las otras dos. Sentirse un tanto y prudentemente animista en circunstancias así viene bien. El hombre debería caer del burro y admitir que la naturaleza no se rige por el calendario ni entiende de contubernios ideológicos y crematísticos de las sociedades. Nuestra madre sigue siendo grande.
Ja esperava aquest moviment meteorològic, que porta quatre gotes a la sequedat tradicional. Canvi de lluna.
ResponderEliminarMalgrat ser grans, el sentit de festa i de llibertat se'ns filtra pels porus. I és que els gens floreixen com els bulbs en primavera.
Muntanya o ciutat, i el mar sempre als ulls.
y no puta, como la otra.
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