Cuando Nietzsche concluyó en su célebre Dios ha muerto, a las castas y clérigos religiosos se les revolvieron las tripas. Pero, más tarde, se rieron de él. Simplemente porque el poder e influencia terrenales que las religiones representan ha seguido perdurando. Los agentes de las religiones son lo suficientemente necios como para identificar su conciencia de casta con la existencia de lo inexistente, aunque no les guste reconocerlo. Es probable que se rieran del filósofo alemán. Pero yo sé que Nietzsche se carcajea mucho más desde la nada al enterarse de que las teorías del bosón de Higgs van en la mejor dirección posible para explicar científicamente orígenes y circunstancias de la vida. ¿Se les revolverán de nuevo las tripas a los fabricantes y mercaderes de religiones? ¿O tendrán las agallas de disolverse en cuanto se compruebe definitivamente dicha teoría?
Que van a disolverse. Algo inventarán para subirse al carro...
ResponderEliminarNunca aceptarán esa (mal llamada por ti) teoría. Lo único que tienen que hacer es convertir las frases y los enunciados de activa a pasiva.
ResponderEliminarhttp://www.larazon.es/noticia/150-esta-particula-es-de-dios-como-lo-somos-todos
No se van a disolver,no. Y después de leer el artículo de LA RAZÓN, que adjunta La Isla Misteriosa, se ve que aprovechan y arriman el ascua a su sardina. Actitud nada nueva, por cierto.
ResponderEliminarSaludos.
Negativo. Como dijo hace poco Juan Antonio Martínez Camino, "la teología no se va a derrumbar" Por desgracia, claro.
ResponderEliminarLa física, por mucho que avance, jamás va a negar la espiritualidad, sencillamente porque sus caminos son diferentes, o quizá el mismo ni que no lo sepamos.
ResponderEliminarPor desgracia, dice el anónimo anterior... Bueno, no... Lo malo es la religión, especialmente la nuestra que es la que a nosotros nos jode (porque sí, nos jode o lo intenta). La espiritualidad es algo íntimo, al menos tal como yo lo concibo. La espiritualidad, usada en el siglo, en la historia, para unos fines concretos, es lo que recibe el nombre de religión. Pero la espiritualidad libre, sin una moral humana, es algo tan humano, que va tan con nosotros, que me imagino que existirá siempre.