Se oirán voces salvajes despotricando contra el limitado, ordenado y pacífico derecho de huelga. Pero no hay mayor huelga que carecer de trabajo, haber perdido el país muchas de las escasas bases productivas del pasado, no cultivar racionalmente los recursos o bien entregar estos a precio de saldo a las corporaciones del beneficio, y carecer de expectativas constructivas que respondan a las necesidades del común. Me obligo a pensar (y cuestionar) el asunto en términos más amplios y profundos de los que pretenden que pensemos y asumamos desde ese estamento propietario de la sociedad que nos ha dividido y la ha quebrado de forma tan violenta.
.
Bien dicho
ResponderEliminardespotriquemos tambien si es menester pero sin antes quemar un poco de propiedad del establecimiento .
ResponderEliminarNo tan quebrada esta la sociedad para hacer algo mas que lamentar.